Entrevista. La también presidenta de la Confederación Latinoamericana y del Caribe de los Nutricionistas y Dietistas destacó la importancia de realizar un seguimiento a los niños para que terminen el tratamiento contra la anemia y así reducir los índices del mal.
SABY MAURICIO ALZA. DECANA NACIONAL DEL COLEGIO DE NUTRICIONISTAS DEL PERÚ
Fuente: El Peruano
¿Cuál es la importancia de las jornadas nacionales en la lucha contra la anemia?
–El objetivo de las jornadas nacionales contra la anemia es incrementar el número de tamizajes (diagnóstico) que solo llega al 50%, así como la suplementación que, en el mejor de los casos alcanza el 40%.
Si bien su fortaleza radica en la sensibilización a la población con respecto a las causas y efectos de la anemia; sin embargo, esta se debe iniciar desde el personal de salud y las instituciones que ello implica.
El primer mensaje que debe quedar claro es que la anemia significa un problema de todos. Si un niño la padece, significa un futuro diferente para él que repercutirá en la productividad de un país, desafortunadamente.
Las jornadas nacionales son importantes para la captación de niños, (casos nuevos) de anemia, despistaje y tratamiento oportuno. Con las sesiones demostrativas reforzamos los mensajes de alimentación y nutrición en el niño y en las madres gestantes.
–¿Qué se debe potenciar en esta cruzada?
–El problema principal es la falta de seguimiento a los niños para que terminen los tratamientos tanto de prevención como de curación. Olvidamos que la recuperación significa todo un proceso y no solo es la detección.
En la actualidad, se recibe a los niños en los programas Cred [Control de Crecimiento y Desarrollo], en que, entre otras actividades, el personal de enfermería le brinda las indicaciones que deberá seguir en casa respecto a la suplementación para prevenir la anemia; sin embargo, eso no garantiza adherencia.
La madre muchas veces desconoce que su niño tiene anemia y por qué es tan importante seguir el tratamiento. Esto se traduce en los aumentos de atenciones de Cred a escala nacional (70%), sin que esto genere la disminución de la anemia. Esta situación amerita revisar la estrategia y considerar algunos cambios en su desarrollo.
–¿Qué puntos se deben considerar en estos cambios?
–Se supone que en las jornadas nacionales se atiende a los usuarios que por diferentes motivos no pudieron acceder a los servicios de salud, a los que se les brinda la facilidad de la atención integral y oportuno tratamiento, que incluye la detección. Por tal motivo, es necesaria una programación detallada de actividades que incluyan desde el cálculo de la población que se atenderá, las fechas que se realizarán (por ejemplo, no programar durante un mundial cuando todas las personas se concentran en los partidos), fijar el número de personal de salud que se requerirá y, sobre todo, establecer un plan comunicacional a la población a la que va dirigida.
Lo principal no debería ser solo la entrega de suplementaciones en un día. El objetivo es que el plan y tratamiento sea sostenible en el tiempo; esto se lograría con un debido monitoreo y compromiso de todos.
–¿Qué medidas adicionales se deben efectuar para potenciar las campañas contra la anemia?
–Es vital el abordaje integral de la anemia, apuntando a la modificación del patrón de consumo de alimentos. La suplementación es una estrategia valiosa para que la niñez reciba un aporte adicional de hierro, pero mientras las familias no incluyan a este mineral en su alimentación diaria, persistirá el problema.
Alianza entre instituciones públicas y privadas
–¿Hacia dónde tiene que apuntar el trabajo de las instancias públicas y privadas para alcanzar la meta de reducir la anemia de 43.6% al 19% para el 2021 en niños entre los 6 y 36 meses?
–La anemia es una tarea de todos. Se necesitan alianzas con instituciones públicas y privadas a todo nivel, mediante un trabajo coordinado, que distingan estrategias individualizadas para la Costa, Sierra y Selva.
La principal causa de anemia en el Perú es el déficit de hierro, entonces es importante la promoción destinada al consumo de alimentos ricos en este nutriente, pero con un previo cambio de la metodología. Las sesiones demostrativas deben ser reforzadas. La madre recibe una “cascada de mensajes”; por lo tanto, se requiere una educación alimentaria y metodologías efectivas, así como los profesionales idóneos.
–¿Cómo se enfoca la labor de los nutricionistas en esta cruzada?
–Los nutricionistas somos los profesionales formados y capacitados para trabajar con las familias y modificar sus hábitos alimentarios. En este aspecto, tenemos en cuenta las determinantes sociales que los afectan, respetamos sus costumbres y conocimientos previos.
Por tal motivo, es necesario fortalecer los equipos de salud, para brindar una atención integral y de calidad a las familias.
Nuestra participación va desde la prevención y promoción de la salud hasta la recuperación. Si bien es cierto que la nutrición no es un tema exclusivo de los nutricionistas, pero debe estar bajo el liderazgo de estos profesionales.
Educadores
El Colegio de Nutricionistas certifica educadores en anemia que son profesionales del rubro entrenados en metodologías que reemplazan la “cascada de mensajes” por el “yo hago y aprendo” en sesiones en las que se usan materiales educativos y preparan alimentos ricos en hierro fáciles de repetir en casa, precisó Saby Mauricio.
Además, dijo, participan los niños que prueban –aceptan o rechazan– las preparaciones y demuestran a sus mamás que vencer la anemia es posible.
“Las madres no solo reciben información sobre las causas y efectos de la anemia, sino que aportan también a la generación de opciones para el consumo de alimentos ricos en hierro”