REVISTA DE LA ASOCIACIÓN DE PRODUCTORES DE PALTA HASS DEL PERÚ
Fuente: Agencia Andina| Foto: Jose luis Perales
Con el lema “Comiendo frutas y verduras, perdura la vida”, el Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) puso hoy en marcha la “Semana Nacional de las Frutas y verduras”, que se prolongará hasta el próximo 30 de abril, y que tiene como principal objetivo impulsar que “comiendo frutas y verduras la vida perdura”.
18 abril 2018. Un amplio número de organizaciones de salud, de derechos humanos, de derechos de los consumidores, de la infancia y centros de investigaciones, así como importantes médicos, académicos e investigadores en salud pública y nutrición de México, Estados Unidos (EU) y Canadá enviaron cartas en atención a los jefes de Estado, los ministros de Relaciones Exteriores, los jefes de Renegociación del TLCAN y los ministros de Salud de cada uno de sus países, así como a sus propios Congresos, pidiendo oponerse a la propuesta presentada por el gobierno estadounidense en las renegociaciones del TLCAN para la prohibición de etiquetados frontales de advertencia en los tres países, los cuales han sido recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una medida para combatir la obesidad.
La propuesta estadounidense sobre la prohibición de etiquetados frontales fue denunciada primero en México y posteriormente revelada por el periódico The New York Times el mes pasado y confirmada en un testimonio en el Congreso al día siguiente por el representante comercial de los Estados Unidos, Robert Lighthizer
“En Norteamérica vivimos una de las mayores epidemias de obesidad en el mundo debida, principalmente al consumo de alimentos y bebidas no saludables. Es urgente que los consumidores tengan acceso a información de advertencia sobre estos productos. Un acuerdo comercial no puede ir en contra del derecho a la información y el derecho a la salud de la población frente al mayor problema de salud pública en la región”, declaró Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor y miembro de la Alianza por la Salud Alimentaria.
La OMS reportó que la prevalencia mundial de obesidad casi se triplicó entre 1975 y 2016. México, EU y Canadá tienen índices de sobrepeso y obesidad muy por encima del promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Esto afecta la calidad de vida, aumenta el riesgo de diabetes, cáncer, enfermedades cardiovasculares y otras condiciones relacionadas con la dieta, y contribuye a un aumento en los costos del cuidado de la salud.
El uso de los etiquetados frontales obligatorios que adviertan a los consumidores si una bebida o un alimento no es saludable, debido a sus altos niveles de azúcar, grasas saturadas y/o sal, es una medida crítica para combatir la epidemia de enfermedades relacionadas con la alimentación.
Las organizaciones recordaron que en Chile y Ecuador ya se implementaron etiquetados frontales de advertencia interpretativos que utilizan símbolos y colores para informar a los consumidores, y han demostrado ser efectivos, por lo que la propuesta de los EU no sólo es un abuso de los mecanismos de los acuerdos comerciales, sino que también va en contra de las recomendaciones para la prevención de la obesidad de la OMS, que incluyen el uso de un etiquetado frontal obligatorio fácil de entender, basado en la mejor evidencia disponible.
Manuel Arango, director de Incidencia y Políticas Públicas de la Salud para la Heart & Stroke Foundation de Canadá, afirmó: “La Heart & Stroke Foundation apoya plenamente la propuesta del gobierno canadiense de requerir un símbolo frontal nutricional en los productos de alimentos y bebidas con alto contenido de azúcar, sal y grasa saturada para apoyar decisiones saludables. Y aplaudimos a los líderes en este campo, como Chile, quienes ya implementaron estas importantes medidas de política pública”.
Y agregó: “Los países tienen el derecho a proteger la salud de sus ciudadanos y no debemos permitir el uso inapropiado de los acuerdos comerciales para socavar estos esfuerzos”.
En la misiva enviada por las organizaciones, académicos e investigadores de los tres países expresaron su profunda preocupación ante tal propuesta, la cual frenaría las iniciativas de etiquetado nutricional frontal obligatorio de advertencia que se están emprendiendo en Norteamérica.
Además, podría crear un precedente negativo y trastocaría los derechos soberanos de los tres países para proteger la salud de sus ciudadanos.
De acuerdo con el doctor Peter G. Lurie, presidente del Centro para la Ciencia en el Interés Público: “El etiquetado frontal ayudaría a los canadienses, estadounidenses y mexicanos a vivir vidas más largas y más sanas, y contribuiría a reducir los costos de atención médica en nuestros respectivos países. El TLCAN no debería ser parte del problema”.
Por su parte el doctor Jim Krieger, director ejecutivo de la organización Healthy Food America y profesor del área de Medicina y Servicios de Salud en la Universidad de Washington, aseguró: “La propuesta de Estados Unidos es una afrenta a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, que llaman al uso de un etiquetado frontal obligatorio y fácil de entender. La gran industria de alimentos y bebidas está detrás de esta propuesta, siguiendo el manual de estrategia desarrollado por la gran industria de tabaco, de emplear los acuerdos comerciales para bloquear políticas de salud pública que ellos perciben como amenazas para sus ganancias. No se debe usar el TLCAN para restringir la capacidad de los países de proteger la salud de sus ciudadanos”.
Las organizaciones y expertos académicos reclamamos el derecho a la vida y a la salud de los ciudadanos, y el interés superior del niño, tal y como lo reconocen las Naciones Unidas y las constituciones de los tres países, por lo que debe imperar por encima de cualquier interés económico o corporativo.
Ningún acuerdo comercial, incluyendo el TLCAN, debe obstaculizarle al consumidor su derecho a la información y tampoco debe restringir la autonomía de un país para proteger a sus ciudadanos, especialmente a los niños, de enfermedades prevenibles y muerte prematura.
El Colegio de nutricionistas del Perú hizo esta actividad como parte de la campaña Anemia no va, que se realizó en centro de salud Conde de la Vega Baja Lima Cercado.
El colegio de nutricionistas del Perú (CNP) presentó diversos platos, postres y bebidas que combaten la anemia. Estos fueron parte de una mesa demostrativa que estuvo dirigida a la lucha de este mal en menores de tres años y madres gestantes.
La actividad se realizó como parte de la campaña de anemia no va, que lidera la nutricionista Cecilia Yale Trujillo del centro de salud Conde de la Vega Baja Lima Cercado con el fin de promover una cultura nutricional para todos las niños y madres gestantes.
También se logró el convenio con Wawafood que promueve una nutrición de calidad para los niños del Perú, con ese fin, la licenciada Cecilia Yale, ha concluido satisfactoriamente uno de los requisitos para ser certificada por el Consejo Nacional del Colegio de Nutricionistas como Educadora contra la anemia.
Esta certificación se le otorga en el marco del programa “ANEMIA NO VA“que promueve básicamente la diversificación de la dieta y el incremento del consumo de alimentos que contienen hierro heminico.
Este programa se viene desarrollando en 16 establecimientos de Lima Metropolitana el cual fue presentado como una alternativa para el terrible flagelo que afecta a la población materno infantil de nuestro país.
Saby Mauricio señaló que el uso de octógonos en productos alimenticios brinda mensajes claros y evita enfermedades como diabetes e hipertensión.
Fuente: Diario Correo
Continúa el rechazo al reglamento de la Ley de Alimentación Saludable. Según Saby Mauricio, decana del Colegio de Nutricionistas del Perú, esta no cumple con el objetivo por el cual fue creado ya que supera los limites permitidos por la Organización Mundial de la Salud, lo que implica un gran daño a la salud de los peruanos.
En ese sentido, Saby Mauricio afirmó en entrevista para Correoque el actual etiquetado de los productos es el responsable queniños menores de 5 años tengan sobrepeso y obesidad, y que la mitad de la población adulta también se encuentre en las mismas condiciones.
Agregó también que el objetivo de los octógonos -propuestos el año pasado por el Ministerio de Salud– no es ir contra los empresarios, como en un primer momento se señaló.
“Señores de la industria: nadie está en contra de ustedes. Queremos un país informado. Ellos (empresas) tienen toda la tecnología para adaptar sus productos a lo saludable”, señaló Mauricio.
Saby Mauricio precisó que el gran problema radica en que estas etiquetas conocidas como semáforos confunde sobre el consumo de nutrientes críticos: azúcar, sodio y grasas saturadas
Este modelo brinda tres tipos de información en la cantidad de nutrientes críticos: medio, alto y bajo, afectando seriamente en la elección del consumidor.
“Queremos que usted sepa que si consume estos productos altos en azúcar, sodio y grasas saturadas, su vida está corriendo peligro”, señaló Mauricio.
Una de las grandes preocupaciones del Colegio de Nutricionistas del Perú es que a través de los semáforos se supera los parámetros de la OMS. “Si consumimos más del 10% de azúcar ya estamos en riesgo, sin embargo, con estos semáforos el aviso es al 25% , es decir cuando hay un incrementó del 15% de azucares”, precisó la dirigente de los nutricionistas.
Para Mauricio, los octógonos no solo dan un mensaje conciso sino que también alertan sobre la ingesta de los nutrientes críticos para la salud. “El consumo excesivo de estos nutrientes genera diferentes enfermedades como: obesidad, diabetes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares e incluso el cáncer”, señaló
Asimismo, indicó que la obesidad trae consigo el apnea del sueño, fatiga e infertilidad. “La obesidad y el sobre peso atacan a todos los órganos”, subrayó.
Finalmente, Saby Mauricio, precisó que desde su gremio han logrado recolectar 11 mil 500 firmas en contra de la Ley de Salud Alimentaria propuesta desde el Congreso pidiendo al hoy presidente de la República, Martín Vizcarra, observar esta norma. Lo que finalmente sucedió.
Sin embargo, esto no es suficiente para ellos, por lo que continuarán recolectando firmas para pedir al Congreso de la República leyes adecuadas en beneficio de la salud pública.
Los gobiernos deben asumir la responsabilidad de tomar medidas concretas y efectivas para proteger la salud de la población.
Fuente:LR
Durante la VIII Cumbre de las Américas que se realiza en Lima, Perú, organizaciones de la sociedad civil de más de 15 países latinoamericanos se unieron para pedir a los Presidentes asistentes que asuman compromisos urgentes con la salud de la población a través de la implementación de políticas públicas que prevengan y controlen a las enfermedades no transmisibles (ENT).
En el marco de la Cumbre, las organizaciones difundieron un manifiesto que refleja la dimensión de esta problemática: las cuatro ENT principales (enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y enfermedades respiratorias crónicas) son la principal causa de enfermedad, discapacidad y muerte prevenible en el mundo en general y en la región de las Américas en particular. Son responsables de más de 70% de las muertes. Esta situación ha sido reconocida como uno de los principales desafíos para el desarrollo sostenible mundial en el siglo XXI. Los costos de estas enfermedades constituyen una carga importante para los presupuestos de salud y para las economías nacionales ya que estas afecciones reducen la productividad económica, sobrecargan los sistemas de salud y promueven la pobreza individual y familiar. Las organizaciones enfatizan que no es posible construir una economía sostenible si la discapacidad y las muertes prematuras por ENT siguen siendo tan elevadas y costosas para los gobiernos.
Estas enfermedades no transmisibles (ENT) causan 5,2 millones de muertes por año (2018) en las Américas y más de un tercio de ellas son defunciones prematuras antes de tener 70 años. Se estima que más de 200 millones de personas en la región viven con una de estas enfermedades, lo que implican que necesitan cuidados médicos a largo plazo y acceso a medicinas.
No se puede negar que la humanidad ha avanzado notablemente en el cuidado de la salud y han sido erradicadas enfermedades causantes de la muerte de millones de personas, pero sigue vigente el problema de prevenir y combatir las Enfermedades No Transmisibles, que hoy predominan entre las poblaciones más vulnerables.
El Manifiesto solicita a los gobiernos que asuman la responsabilidad de tomar medidas concretas y efectivas para proteger la salud de la población y disminuir el impacto de estas enfermedades. Algunas de las políticas que van en esta línea son las medidas fiscales que aumenten el precio de los productos no saludables (cigarrillos, bebidas azucaradas, alcohol, comestibles altamente procesados, entre otros), el etiquetado frontal en los alimentos a fin de que los consumidores puedan acceder a información clara, entre otras medidas.
La reunión de Alto Nivel sobre Enfermedades No-Transmisibleque se planea en las Naciones Unidas el 27 de septiembre 2018 en Nueva York requiere la presencia de presidentes de toda la región. La razón es que, para reducir estas enfermedades, es necesario que se involucren muchos diferentes sectores del gobierno. Son los presidentes lo que deben priorizar la salud de todos por encima de las ganancias económicas de algunos y dar la dirección necesaria que permita estrategias innovadoras y efectivas que nos den más salud y más vida.
En la sociedad actual y al ritmo al que vivimos generalmente la gran mayoría de nosotros sufrimos ansiedad y muchas veces focalizamos esto en las comidas, donde aparece el “hambre desmedida” por cualquier alimento o algunos específicos, que en realidad no es hambre, sino un apetito que tiene que ver más con lo psicológico que con lo biológico.
Aquí algunas recomendaciones que pueden ser útiles para prevenir dichos episodios:
Por último, recordar siempre que debemos buscar actividades que nos despierteninterés como hacer ejercicio físico, bailar, tocar un instrumento, salir a caminar, tareas del hogar, dibujar, pintar un cuadro, hacer alguna actividad manual, leer un libro, de manera que nuestra atención esté puesta en ellas y no en la comida.
Lic. Romina Krauss
El sobrepeso y la obesidad van en aumento en la población general, pero lo más alarmante es que las cifras aumentan en el grupo etario de entre 4 y 12 años, esto nos refleja que la alimentación de nuestros niños está fallando. Perú se ubica tercero en el ranking de obesidad infantil entre los países de América del Sur.
Lo importante de esto es que la población infantil depende de sus padres, tutores o encargados para su alimentación, por lo tanto, somos responsables en gran medida de esta incidencia de la obesidad.
Debemos tener en cuenta que los gustos y preferencias alimentarias son aprendidos, desde las primeras papillas que reciben los bebés hasta la juventud, esto quiere decir que el hecho de que nuestros hijos coman verduras y frutas o prefieran los alfajores y papas fritas, muchas veces depende de cómo los educamos en cuanto a la alimentación, pero más allá de discursos, lo más importante, son los actos y el ejemplo. De nada sirve indicar a un niño que coma manzana porque es saludable mientras los padres, en ese momento, eligen un helado.
Las complicaciones más importantes que provoca la obesidad en los niños son:
Muchas son las consecuencias de llevar una mala alimentación desde la niñez. Sabemos que un niño obeso tienen muchas más probabilidades de desarrollar enfermedades crónicas en la adolescencia, juventud o adultez, lo cual reduce su esperanza y calidad de vida.
Algunos consejos nutricionales: